En el trabajo ha habido cambio de planta, la nueva ubicación no me entusiasma mucho excepto, que desde la cuarta planta tengo la suerte de ver todos los días a útlima hora la puesta del sol. ¡¡ grr!!, el reflejo del cristal, imposible abrir la ventana.
Esta semana cayó un tormenton estando en el trabajo, después salió el arco iris, divertido irme con la cámara escondida al baño y sacar las fotos.